RESEÑA EL NIÑO CON EL PIJAMA DE RAYAS
Durante los últimos
años, se han filmado diversos largometrajes basados en la Segunda Guerra
Mundial (1939-1945). Entre ellos está El
niño con el pijama de rayas que, a
su vez, se basó en el libro de John Boyne, publicado en el año 2006.
El niño con el pijama de rayas nos remite a Berlín, 1942. Bruno, un niño de
ocho años, hijo de un oficial nazi, se muda junto a su familia a una zona
aislada dentro de un entorno rural.
En uno de sus curiosos
paseos descubre una alambrada que le separaba del que, posteriormente, sería un
gran amigo: Shmuel. La alambrada no solo impedía el contacto físico, sino que
además, definía su nivel social y, por tanto, presentaba dos realidades
completamente opuestas. Sin embargo, ambos estaban unidos por el sentimiento de
inocencia, ternura y sabiduría característico de la infancia.
Debido a su ingenuidad,
ninguno de los dos entendía el porqué de su separación. Tras largas
conversaciones indagando sobre la situación en la que se encontraban, intentan
descubrir la problemática que les rodea.
Esta película muestra cómo de cruel
puede llegar a ser el ser humano. Es impactante como los judíos, que tenían
vidas asentadas, exitosas y de provecho, fueran rebajados a ese nivel y
tratados como animales; como Pavel, un médico que podría ser de utilidad en la
casa pero lo tenían de sirviente.
Además, en el film se aprecia
claramente que, dentro de la guerra, había gente que adopta una postura
radical, y gente que veía la gravedad de los crímenes de Alemania. La madre de
Hugo, que vivía en ignorancia, al descubrir que su marido está asesinando a
judíos, pierde su alegría y sus fuerzas para apoyarlo. De la misma manera, la
abuela rechaza las invitaciones de visita, ya que no soporta ser testigo tan de
cerca.
Hugo nos enseña cómo los niños son
incapaces de asimilar la lógica de maltratar a una persona cualquiera por sus
rasgos. La realidad le llega poco a poco pero él nunca llega a poder entender
porqué su amigo está encerrado y el libre.
Ainara
Crú, Virginia Veli y Marina Martínez
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